Una de las cosas que más me gustan de mi trabajo es la posibilidad que tengo para conocer gente. Y esa posibilidad crece exponencialmente cuando realizo algún curso o taller.

Entonces, es cuando más disfruto de mi trabajo. No sólo porque puedo formar a otros profesionales, sino porque yo mismo aprendo mucho de cada uno de ellos. Sus preguntas son ligeras sugerencias que hacen que el próximo peinado sea un reto mucho más preciado.

Ver las caras de los alumnos/as mientras realizo los recogidos, sus deseos de aprender,…, hacen que me sienta bien con mi trabajo. Y eso es lo que se respira en este precioso vídeo de uno de los cursos de recogidos que tuve el gusto de impartir a finales del año pasado.

Espero que lo disfrutéis tanto como lo hice yo.